Más de la mitad de la población reconoce haber estado preocupada en algún momento por su papada, es decir, por la grasa localizada debajo del mentón y en la parte anterior del cuello. La grasa submentoniana no sólo se acumula en personas con sobrepeso, sino que puede ocurrir en cualquier persona como consecuencia de la predisposición genética o la edad más avanzada, y no responde ni a la dieta ni al ejercicio.
Dicha grasa puede tener un impacto psicológico negativo sobre el paciente, como falta de confianza o autoestima. Pero la mayoría no quieren pasar por una cirugía para eliminar la papada, por múltiples motivos como la falta de tiempo o desear un método menos invasivo.
Con la Lipopapada Enzimática, técnica de infiltración de enzimas con microagujas de enzimas lipolíticas certificadas o con ácido desoxicólico de origen sintético, solvente para emulsionar la grasa subcutánea de la papada, que también se encuentra presente de forma natural en el cuerpo humano, consigue la disolución de grasa no quirúrgica. Las células de adipocitos de la papada se destrintegran de forma segura y eficaz, es decir, las células que almacenan la grasa.
Procedimiento:
– Preparación estéril y lista para usar, con seguridad probada en más de 40 países.
-Tras el tratamiento suele haber inflamación de la zona tratada que durará alrededpr de 24 horas y es signo de buena respuesta al tratamiento. Es decir, la inflamación es aliada de mejores resultados.
– También pueden presentarse algunas molestias locales, que desaparecen espontáneamente o con la ayuda de algún analgésico.
– Resultados se obtienen en 3 sesiones de mesoterapia, separadas cada 3 ó 4 semanas.
– Cada sesión de 30 minutos aproximadamente cada una
– Los resultados se notan desde la primera sesión, pero se harán más evidentes con cada aplicación.